La línea 58 ganó la licitación que le permitía hacer el trayecto de la línea 53 en la ciudad de Capiatá. Este es el principal motivo por el cual los empresarios y choferes de ambas líneas juegan a una “guerra” en esta ciudad.
Los empresarios y choferes de la línea 53 supuestamente amedrentan y agreden a los choferes de la línea 58, de acuerdo a la versión de los dueños de la compañía que administra la empresa “Capiatá S.R.L”.
La otra empresa es “Ciudad de Capiatá S.R.L”, línea 53, que perdió la licitación para el itinerario que realizaba.
Como represalia a las supuestas agresiones de los choferes de la línea 53, la empresa que administra la línea 58 decidió cortar el acceso a la compañía Rojas Cañada, a la altura del kilómetro 21 de la Ruta II.
Los administradores de la línea 58 pidieron al fiscal de Capiatá, Víctor Villaverde, que intervenga y detenga a los supuestos autores de las agresiones.
Con la pelea, los que pierden son los usuarios del transporte público.
“Hace más de nueve años que estamos así. Estamos indignados. Somos víctimas de vandalismo. Necesitamos mucho. Hay gente que tiene que ir a trabajar”, dijo Mirta Mabel Samudio , una de las pasajeras afectadas.
El Ing. Roberto Giménez, de la empresa “Capiatá S.R.L”, contó que hay roturas de vidrios de parte de empleados de la línea 53.
De acuerdo al empresario, este conflicto lleva tiempo y la línea 53 tiene el permiso del itinerario cancelado. “La empresa opera en la zona desde el año 1998 y este año nos adjudicamos el itinerario de la línea 53”.
“Con estas amenazas no podemos arriesgarles a nuestros choferes”, explicó.
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