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| Sin vencedor. Capiatá rescató un empate en Luque ante General Díaz. Foto: Miguel Houdin-Úh |
General Díaz entró con la intención de hacer respetar su escenario pero sobre el césped del Adrián Jara se vivió un partido con ritmo de amistoso a lo largo de la primera etapa. El conjunto auriazul dependía mucho de la magia del Gato García y de la velocidad de Óscar Ruiz, pero ambos jugaron demasiado distante del arco defendido por Mario Santilli.
Las Águilas se posesionaron del balón pero estuvieron imprecisos en la zona de peligro cuando tenían espacios para avanzar en conjunto. Con Alfredo Cano como estandarte, el equipo de García monopolizó el balón y dejó al rival la fórmula del remate desde larga distancia. Primero probó suerte Fabio Escobar y después el escurridizo Óscar Ruiz pero faltó dirección para crear zozobra.
El central Walter Cabrera rompió con el tedio y mediante un fuerte golpe de cabeza, acechó algo de peligro hacia el arco del Vasco Aurrecochea. Jacquet vio la supremacía y mandó al campo de batalla a Sergio Samudio para brindar compañía en ofensiva a Escobar, que hasta ese momento no pesaba en nada en el compromiso.
El partido siguió su rumbo y Alfredo Cano llevó noticias mediante un tiro libre que Aurrecochea tiró con algunos inconvenientes al tiro de esquina. Los futbolistas, igual que el tiempo, estaban demasiado nublados. Carlos Amarilla pitó el final justo a los 45 minutos y el juego se marcó a vestuarios en busca de mejores inspiraciones.
En la complementaria ambos elencos entraron con otra motivación y en pocos minutos superaron todo lo hecho en la primera etapa. La superioridad en el campo se reflejó en el marcador cuando Óscar Gamarra ajustició a Aurrecochea, a los 10 minutos de la segunda fracción.
La desventaja despertó a los auriazules y pudieron llegar al empate a los 19, pero Ruiz evaporó la chances clara porque el volante no pudo controlar una jugada colectiva entre Ton Ortiz y Fabio Escobar. El Depor adelantó sus líneas, prescindió de García por Romero, pero siguió jugando sin la convicción necesaria para dar vuelta un marcador adverso.
Aunque en el fútbol siempre hay sorpresas. Santilli salió muy lejos y mal pero Sergio Samudio tardó una enormidad para definir y dio tiempo al defensor para realizar un cruce providencial. El partido invitaba a General a liquidar de contra pero Juan Noguera falló su oportunidad.
Cuando menos se esperaba Ricardo Ortiz aprovechó la oportunidad y mandó la pelota a la red para gritar la igualdad en Luque a los 30 minutos del complemento. A la sorpresa del gol, el conjunto visitante le sumó contagio y estuvo a punto de terminar la patriada.
Los equipos tuvieron vergüenza deportiva y el juego mejoró mucho en el segundo tiempo. General Díaz creyó que la obra estaba terminada y se durmió en los minutos finales para sufrir un golpe demasiado fuerte. Sin embargo los hombres de Mario Jacquet no dieron el brazo a torcer y consiguieron un premio demasiado grande en el Adrián Jara.
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