Capiata y Sol empataron 1 a 1 foto. UH |
Capiatá reaccionó en el Erico Galeano y empató 1-1 con Sol de América que sorprendió a poco de iniciarse el juego con un gol del juvenil Jonathan Samaniego. Óscar Ruiz, tras un precioso centro de Irrazábal, dictó sentencia en la ciudad de los Mitos.
El PARTIDO. Capiatá y Sol de América disputaron un excelente primer tiempo en el Erico Galeano con mucho ritmo y situaciones peligrosas. El equipo de Daniel Garnero entró mejor en el partido y mostró un fútbol rebelde, que coincidió con el momento más taciturno del Escobero.
El Unicolor consiguió dar el primer golpe por intermedio del juvenil Jonathan Samaniego. Corrían 20 minutos y hasta este tiempo era la visita que mandaba en la cancha al madrugar en el desempeño a los auriazules.
No obstante, el gol despertó al local que empezó a ganar terreno con la aparición de su líder Julio Irrazábal. El volante apareció con su buena pegada a los 27' y tras un centro preciso en un tiro libre, Óscar Ruiz no necesitó hacer mucho para mandar a la red la igualdad.
En el resto de primera fracción, el choque fue desigual en la ciudad de los Mitos porque Sol se evaporó de la puja y las acciones peligrosas pertenecían al local. Irrazábal, con un disparo rastrero, y Carlos Ruiz Peralta, en dos ocasiones muy claras, acercaron la remontada al final del primer tiempo.
En el complemento se siguió viendo las buenas sensaciones de Capiatá, pero todo lo bueno de su creación las desperdició en la definición. Cristian López, en cancha desde los 16' por el juvenil Juan Giménez, fue el protagonista de tres jugadas claras, pero cuando anotó en el 57' estaba en posición adelantada.
A pesar de que después los dos perdieron algo de precisión, Sol buscó de contragolpe porque dedicó más el quehacer en tareas de obstrucción. El ingreso de Ernesto Álvarez, un delantero más expediente que Samaniego, brindó más compañía al Loco Pérez y más peso a la delantera danzarín.
Los últimos minutos fueron trepidantes, hubo chances para ambos lados. El Loco Pérez, Álvarez y Abreu, a poco de haber entrado, acercaron peligro hacia el arco de Servín. Por el lado del Escobero, Cristian López nunca encontró la puntería necesaria.