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| foto. UH |
Sportivo Luqueño, superior de comienzo a fin, gozó en el Feliciano Cáceres de otra goleada prolongando frente al Deportivo Capiatá las buenas sensaciones (5-1), luego de aplastar con igual resultado hace cuatro días al Aurora boliviano para pasar a la segunda ronda de la Copa Sudamericana.
Sportivo Luqueño (8) abandonó la última posición del torneo Clausura, que ahora ocupa Nacional (6), a costa de un débil Capiatá que casi no opuso resistencia y cayó de manera justa 5-1 frente a un equipo mejor estructurado y que mostró su fortaleza anímica tras la goleada copera hace cuatro días.
Dos goles de José Leguizamón, uno de ellos desde el punto penal, uno de Miguel Godoy, Di Vanni y otro de Esteban Ramírez, certificaron la victoria del dueño de casa. Descontó Dionisio Pérez, pero no alcanzó para suavizar la mala noche del equipo.
Este resultado profundiza la crisis del Deportivo Capiatá y deja contra las cuerdas a su técnico Humberto García, más aún después de la última semana en el que éste tuvo que soportar las duras críticas del presidente de la entidad Óscar Barreto.
EL PARTIDO. Sportivo Luqueño tomó la iniciativa, pero recién pudo alzar la superioridad en el marcador por intermedio de José Leguizamón a los 35 minutos, frente a un Deportivo Capiatá que nunca igualó el partido en intensidad y carácter.
El defensor, que en la noche cumplía 24 años, pescó en río revuelto y ajustició a Mario Santilli con un remate a quemarropa. Salvo algunas arremetidas de Rodrigo Bernal, el Escobero firmó un soso primer tiempo y tuvo que meter la pierna para cortar el juego dinámico que propuso en su casa el Auriazul.
A los 20' ya se había salvado del primero cuando el disparo que desenfundó Jorge Ortega tras centro de Miguel Godoy había devuelto el travesaño. El protagonismo de Luqueño se mantenía inalterable y así aumentó la diferencia desde los 12 pasos con el mismo protagonista de la primera conquista.
Una falta sobre Ortega visualizada por Federico Ríos a los 39 minutos, más discutida que la cometida a los 3' sobre Derlis Alegre, dio la chance a Leguizamón para gritar por duplicado y estirar la ventaja del conjunto local. Entre la algarabía local y la desazón visitante, el juego muy dispar partió al descanso.
En el complemento, Humberto García envió como segunda alternativa a Cristian López, ya que en los minutos finales del primer tiempo había ingresado Julio Irrazábal. Nada pudieron hacer, porque a 6 del reinicio Miguel Godoy puso un misil en el arco escobero y apagó por complemento la esperanza de un mejor marcador.
El resultado permitió a Rivera dar descanso a Luis Miño, que dejó su lugar a Esteban Ramírez. El trámite no cambió a pesar del descuento de Dionisio Pérez a los 73 minutos, y más allá de los fallos de Jorge Ortega, sus compañeros Guido Di Vanni y Esteban Ramírez aprovecharon las facilidades y senteciaron con un marcador crudo, pero justo.
fuente d10.com.py
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